CRÍTICA VUELVE AL PARO ANTE OTRO INCUMPLIMIENTO PATRONAL
La Asamblea de Trabajadores del diario Crítica de la Argentina votó este jueves por unanimidad y con asistencia masiva volver a la huelga hasta que la empresa Papel 2.0 S.A. cumpla con el pago de la porción que adeuda de los haberes de marzo. Luego de sucesivos incumplimientos del acuerdo firmado en enero último ante el Ministerio de Trabajo y tras cinco meses de cobrar en cuotas nuestros salarios, los trabajadores del diario decidimos interrumpir toda tarea y realizar un paro activo hasta que se concreten los pagos prometidos.
En virtud de la adhesión masiva que concitó la medida, es probable que el diario no llegue a la calle este viernes y que la página web no se actualice hasta nuevo aviso. Las medidas se levantarán apenas la empresa salde lo adeudado a los 170 trabajadores de planta y a los colaboradores externos, que también acompañan la decisión.
En caso de que se pague, el personal se mantendrá de todos modos en estado de alerta y movilización, ante los comentarios empresariales acerca de un posible ingreso de la compañía en concurso de acreedores, y a la espera de que el viernes próximo se concrete el pago de los haberes de abril en los términos legales. De producirse un nuevo incumplimiento, ya se ha votado volver al paro activo inmediatamente.
29 DE ABRIL DE 2010
TRABAJADORES Y COMISIÓN GREMIAL INTERNA DEL DIARIO CRÍTICA DE LA ARGENTINA - Contactos: 156-562-6566 / 156-844-4310 / 156-104-8205
Viernes 23 de abril, 17 horas, por BULACIO, en el Obelisco: A 19 años de su asesinato, denunciamos que el Estado continúa con su política de exterminio de la REBELDIA JUVENIL
BULACIO, a 19 años: Impunidad garantizada
El 19 de abril, el comisario jubilado de la Policía Federal, Espósito, celebrará en libertad los 19 años de impunidad de "El caso Bulacio", el pibe de 17 años al que golpeó, asesinándolo, en 1991 en una comisaría en el marco de una razzia en las afueras de un recital. En los festejos estarán jueces, fiscales y una larga lista de funcionarios policiales y políticos encubridores.
En noviembre pasado, Rubén Carballo fue golpeado hasta la muerte por otros asesinos de uniforme en las afueras de otro recital. El hilo conductor que une ambos hechos se extiende a lo largo de años: los crímenes cotidianos de la policía contra miles de jóvenes, pobres, trabajadores, con el encubrimiento de los poderes judicial y político.
En estos días quedó en libertad, tras solo 12 años preso, Guillermo Luque, "el hijo del poder" catamarqueño, violador y asesino de María Soledad. Noticia que debe sacudir la memoria popular para tomar conciencia de que a través de la lucha y movilización hemos conquistado algunas condenas; pero fundamentalmente que, a pesar de esas luchas, los crímenes del Estado tendrán garantía de impunidad mientras no decidamos enterrarlo revolucionariamente.
Así lo atestiguan los asesinatos de Miguel Bru, Víctor Choque y Teresa Rodríguez, los 30 muertos del 20 de diciembre del 2001, Kosteki y Santillán, Ezequiel Demonty, los recientes de Baradero o los más de 2.800 pibes asesinados por el estado en "democracia".
La lucha de la madre de Bulacio junto a CORREPI logró que la Corte Interamericana de DD.HH. lo caratule como "crimen de estado" en el 2003, intimando a Argentina a reposicionar a la madre en el lugar de querellante. El entonces flamante gobierno de Kirchner y la Suprema Corte "garantista" se limitaron a anular la prescripción de la causa, haciendo caso omiso de la intimación hasta hoy. Así se inauguraba la política de DD.HH. del Gobierno, a la que se sumarían la desaparición hace 43 meses de Julio López; el asesinato de Fuentealba en Neuquén sin siquiera imputar al responsable político, Sobisch; la desaparición de Luciano Arruga tras varias amenazas policiales, y el reciente asesinato de Silvia Suppo, otra testigo central en una causa contra militares de la dictadura. Y bajo el gobierno "de los DDHH" un joven pobre es asesinado cada 28 horas por el aparato del estado.
El asesinato de Walter fue una bandera de lucha antirrepresiva por mucho tiempo. Pasados 19 años, nunca será tarde para crear conciencia, reagrupar fuerzas y avanzar en la construcción de una organización capaz de oponerse y enfrentar en todos los terrenos al actual Estado de los capitalistas: el mismo que ayer impuso el golpe genocida, que asesinó a Bulacio y que hoy garantiza la impunidad de la represión sobre jóvenes pobres, trabajadores y sectores populares.
Justicia para BULACIO - Aparición con vida de JULIO LOPEZ - Cárcel a los asesinos de SILVIA SUPPO - Basta de persecuciones contra trabajadores - Basta de impunidad del Estado genocida
QUE SE VAYAN TODOS - Para que se vayan: HAY QUE ECHARLOS
BULACIO, a 19 años: Impunidad garantizada
El 19 de abril, el comisario jubilado de la Policía Federal, Espósito, celebrará en libertad los 19 años de impunidad de "El caso Bulacio", el pibe de 17 años al que golpeó, asesinándolo, en 1991 en una comisaría en el marco de una razzia en las afueras de un recital. En los festejos estarán jueces, fiscales y una larga lista de funcionarios policiales y políticos encubridores.
En noviembre pasado, Rubén Carballo fue golpeado hasta la muerte por otros asesinos de uniforme en las afueras de otro recital. El hilo conductor que une ambos hechos se extiende a lo largo de años: los crímenes cotidianos de la policía contra miles de jóvenes, pobres, trabajadores, con el encubrimiento de los poderes judicial y político.
En estos días quedó en libertad, tras solo 12 años preso, Guillermo Luque, "el hijo del poder" catamarqueño, violador y asesino de María Soledad. Noticia que debe sacudir la memoria popular para tomar conciencia de que a través de la lucha y movilización hemos conquistado algunas condenas; pero fundamentalmente que, a pesar de esas luchas, los crímenes del Estado tendrán garantía de impunidad mientras no decidamos enterrarlo revolucionariamente.
Así lo atestiguan los asesinatos de Miguel Bru, Víctor Choque y Teresa Rodríguez, los 30 muertos del 20 de diciembre del 2001, Kosteki y Santillán, Ezequiel Demonty, los recientes de Baradero o los más de 2.800 pibes asesinados por el estado en "democracia".
La lucha de la madre de Bulacio junto a CORREPI logró que la Corte Interamericana de DD.HH. lo caratule como "crimen de estado" en el 2003, intimando a Argentina a reposicionar a la madre en el lugar de querellante. El entonces flamante gobierno de Kirchner y la Suprema Corte "garantista" se limitaron a anular la prescripción de la causa, haciendo caso omiso de la intimación hasta hoy. Así se inauguraba la política de DD.HH. del Gobierno, a la que se sumarían la desaparición hace 43 meses de Julio López; el asesinato de Fuentealba en Neuquén sin siquiera imputar al responsable político, Sobisch; la desaparición de Luciano Arruga tras varias amenazas policiales, y el reciente asesinato de Silvia Suppo, otra testigo central en una causa contra militares de la dictadura. Y bajo el gobierno "de los DDHH" un joven pobre es asesinado cada 28 horas por el aparato del estado.
El asesinato de Walter fue una bandera de lucha antirrepresiva por mucho tiempo. Pasados 19 años, nunca será tarde para crear conciencia, reagrupar fuerzas y avanzar en la construcción de una organización capaz de oponerse y enfrentar en todos los terrenos al actual Estado de los capitalistas: el mismo que ayer impuso el golpe genocida, que asesinó a Bulacio y que hoy garantiza la impunidad de la represión sobre jóvenes pobres, trabajadores y sectores populares.
Justicia para BULACIO - Aparición con vida de JULIO LOPEZ - Cárcel a los asesinos de SILVIA SUPPO - Basta de persecuciones contra trabajadores - Basta de impunidad del Estado genocida
QUE SE VAYAN TODOS - Para que se vayan: HAY QUE ECHARLOS
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